Si tiene diabetes, su primer pensamiento podría ser sobre el azúcar, no la sal. Pero la ingesta de sal puede ser tan importante para su salud. Este artículo explica por qué necesita observar su consumo de sal y cómo hacerlo con la diabetes.
¿Por qué debería preocuparse por la sal?
La sal es una de las principales formas en que recibimos sodio en nuestra dieta. Una ingesta alta de sodio puede elevar su presión arterial, lo que a su vez aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular, dos condiciones que son más comunes cuando tiene diabetes tipo 2 .
La American Diabetes Association y el USDA recomiendan un límite superior de 2,300 mg de sodio por día (esa es la cantidad de sodio en una cucharadita de sal). Para poner ese número en perspectiva, considere esto: el estadounidense promedio consume 3.440 mg de sodio por día. Para personas con presión arterial alta o que son ancianos, la recomendación es más estricta: 1.500 mg por día.
¿Cómo puedes comer menos sal?
Si eres como la mayoría de las personas, el 75% del sodio de tu dieta proviene de restaurantes y alimentos procesados. Los alimentos envasados y preparados suelen estar cargados de sal (es un conservante y ayuda a que la comida sepa bien). La comida del restaurante también es notoriamente salada, ya sea que esté comiendo en un restaurante de comida rápida o algo más elegante. Entonces, la gran sugerencia general es comer menos a menudo y comer más alimentos frescos y no procesados en casa.
Coma más de estos alimentos
Cocinar con alimentos frescos y sin procesar es uno de los pasos más importantes que puede tomar para reducir el sodio en su dieta.
En lugar de confiar en los alimentos preparados, intente hacer de estos alimentos la base de su dieta:
- Frutas y verduras: frescas o congeladas; las variedades enlatadas generalmente tienen sodio adicional
- Granos enteros: recuerde, el pan a menudo tiene mucho sodio. la pasta y los granos integrales que usted cocina solo tienen el sodio que le agrega
- Nueces y semillas: compre sin sal, preferiblemente crudo (puede asarlas usted mismo)
- Carne, aves de corral y mariscos frescos o congelados, no envasados en agua salada o sal
- Frijoles secos, guisantes y lentejas: cómprelos secos y cocínelos usted mismo para ahorrar en sodio
- Alimentos empacados: si está comprando caldos preparados y alimentos enlatados, busque "bajo en sodio" o "sin sal añadida"
Tenga cuidado con estos alimentos
Algunos alimentos tienden a ser especialmente altos en sodio. Si está comprando alimentos envasados y preparados, querrá leer la etiqueta de información nutricional para ver cuánto sodio contiene el producto. Además de decirle cuántos miligramos de sodio hay en cada porción, la etiqueta también traducirá esa cantidad en un porcentaje del valor diario (el porcentaje de ese límite de 2.300 mg). Tenga cuidado con estos alimentos, que tienden a ser especialmente altos en sodio:
- Carne procesada, como tocino, salchichas y fiambres
- Queso
- Bocadillos preparados como papas fritas y galletas
- Los condimentos, como el ketchup pueden cargarse con sal
- Aderezos para ensaladas
- Las sopas y el caldo preparados pueden ser particularmente ricos en sodio
Reduzca su consumo diario de sal y cuide su corazón.