Deshacerse de callos y callos en los pies con estos remedios

Los callos y callosidades son áreas gruesas y endurecidas de la piel que son causadas por frotamientos repetidos, fricción o presión. Se pueden formar en cualquier lugar, pero se encuentran comúnmente en las manos, los dedos de los pies, los talones o las plantas de los pies.

Los callos son regiones pequeñas y definidas de piel engrosada que generalmente se forman en las áreas óseas del pie, como los lados o la planta del pie, o entre las puntas de los dedos de los pies o en la parte superior de los mismos.

A menudo doloroso o sensible al tacto, los callos son causados ​​por la presión repetida de zapatos apretados o actividades como correr.

Los callos son parches de piel dura menos definidos. Típicamente más grandes que los callos y rara vez dolorosos, los callos a menudo se encuentran en el talón, la planta del pie, entre los dedos de los pies, en el dedo gordo del pie o en las manos y los dedos. El tenis, el golf, el levantamiento de pesas, la gimnasia o tocar la guitarra o el violín son causas comunes.

Para tratar los callos y los callos, aquí hay algunos remedios y consejos que pueden ayudar:

1) Eliminar la causa de la presión

El primer paso para deshacerse de sus callos y durezas es eliminar la fuente de la fricción o presión. La mayoría de callos y durezas desaparecerán cuando se elimine la causa.

Haga medirse los pies periódicamente. Con el envejecimiento, los pies pueden volverse más largos y más anchos, el acolchado protector en los pies puede adelgazarse y los arcos pueden volverse más planos. Como resultado, sus zapatos pueden apretarse o presionar sus pies.

Asegúrate de que tus zapatos calcen (evitando los zapatos demasiado ajustados o sueltos), usa calcetines con zapatos y cambia los talones si agravan el problema. Debería poder mover los dedos de los pies en sus zapatos (una tienda de reparación de calzado puede estirar los zapatos de cuero donde están apretados).

Si practica deportes o utiliza herramientas de mano, use guantes de protección.

2) Remoja tus pies en agua tibia

Mojar los pies en agua tibia durante aproximadamente 10 a 20 minutos puede ayudar a suavizar los callos e incluso puede reducir temporalmente el dolor al disminuir la hinchazón y la inflamación debajo de la piel. Después de remojar el pie, seca tus pies y humecta.

3) Frote suavemente el maíz o el callo con una piedra pómez

Al suavizar los callos con un remojo en los pies, se pueden desgastar suavemente con piedra pómez, siempre que no duela o que no despegue demasiado la piel (lo que puede causar hemorragia e infección). No corte ni afeite callos o durezas, porque eso puede aumentar el riesgo de infección.

Puede repetir la remoción y la exfoliación de piedra pómez varias veces a la semana hasta que el maíz se haga más pequeño.

4) Hidratar el área

Busque lociones o cremas con urea o ácido láctico, que ayudan a suavizar y disolver gradualmente la piel engrosada. Se pueden encontrar en cualquier farmacia en la sección de loción.

Otra opción es el aceite de ricino , un aceite espeso que se puede comprar en la farmacia. Antes de acostarse, intente sumergir un hisopo de algodón en aceite de ricino y aplicarlo en el área afectada. Póngase un par de calcetines viejos para evitar que las sábanas se manchen. El aceite de ricino no debe aplicarse a la piel rota.

También puede hidratar regularmente con vitamina E o aceite o crema de caléndula a base de hierbas para ayudar a mantener la piel suave y evitar la formación de grietas dolorosas en la piel.

5) Proteger el área

Para proteger el área de más presión e irritación, busque almohadillas adhesivas de maíz o callos no medicinales en la farmacia. Puede usarlos debajo de sus calcetines y zapatos (o guantes).

Cuándo ver a tu médico

Si tiene alguna preocupación sobre sus pies, incluida la aparición de nuevos bultos o tumores, consulte a su médico antes de probar cualquier remedio en el hogar.

Si tiene diabetes, no debe tratar de auto-tratar sus callos o durezas.

Sus pies requieren un tratamiento adecuado para evitar complicaciones graves, como úlceras en los pies e infección.

Aunque la exfoliación suave puede ayudar en algunos casos, si sus callos o durezas son extensas, molestas, persistentes, muy dolorosas o inflamadas, debe consultar a su médico.

Para eliminar el maíz, un proveedor de atención médica puede ayudar a eliminar las capas de piel dura. No intente cortar o afeitarse la piel dura por su cuenta, ya que puede aumentar su riesgo de contraer una infección en el pie.

La línea de fondo

Las medidas preventivas y los remedios caseros suaves pueden ayudar a suavizar la piel endurecida. Solo asegúrese de buscar atención profesional cuando sea apropiado.

> Descargo de responsabilidad: la información contenida en este sitio tiene fines educativos únicamente y no sustituye el asesoramiento, diagnóstico o tratamiento de un médico con licencia. No está destinado a cubrir todas las precauciones posibles, las interacciones medicamentosas, las circunstancias o los efectos adversos. Debe buscar atención médica inmediata ante cualquier problema de salud y consultar a su médico antes de usar un medicamento alternativo o hacer un cambio en su régimen.