Lo que usted necesita saber sobre la tiña de la cabeza

Tiña en el cuero cabelludo

Tinea capitis es el nombre científico de la tiña en el cuero cabelludo. La tiña de la cabeza es común en los niños, especialmente entre las edades de 3 a 7. La mayoría de estas infecciones por hongos son causadas por dos hongos diferentes:

Transmisión

Los hongos que causan la tinea capitis producen esporas que se vierten en la ropa, cepillos o peines del niño infectado, e incluso en el aire alrededor del niño.

Estas esporas pueden sobrevivir durante meses en objetos. Los niños contraen tinea capitis después de que entran en contacto con una persona o animal infectado, o después de que entran en contacto con esporas de otras maneras. Por ejemplo, una fuente común de esporas son compañeros de clase o adultos que portan las esporas en su piel o cuero cabelludo sin estar infectados.

Los siguientes factores aumentan las probabilidades de que un niño contraiga una infección por tinea capitis:

Apariencia

El síntoma más común de la tinea capitis es la pérdida de cabello. También hay un sarpullido, que puede verse diferente dependiendo de si el hongo entra dentro del tallo del cabello o se queda en el exterior del tallo del cabello. Las apariencias comunes incluyen:

Diagnóstico

La tinea capitis se diagnostica por varios métodos. El examen de una lámpara de Wood puede mostrar pelos que se vuelven de color azul verdoso. Una prueba de KOH en el cabello o el cuero cabelludo puede mostrar hongos bajo el microscopio.

Finalmente, un cultivo fúngico del cabello o el cuero cabelludo puede mostrar qué tipo de hongo está causando la infección.

Tratamiento

Es importante tener en cuenta que la tinea capitis no se puede tratar con cremas antimicóticas tópicas. Tiene que ser tratado con medicamentos antimicóticos orales, a veces durante varios meses. Los medicamentos antimicóticos comunes utilizados incluyen:

Prevención

La mejor manera de prevenir una infección por tinea capitis es usar el sentido común. No comparta peines, cepillos o gorras con alguien fuera de su familia, y no toque a otros niños que tengan sarpullido en el cuero cabelludo o animales con sarpullido en cualquier parte.

Prevenir una infección recurrente o prevenir una infección en personas en contacto cercano con un niño infectado (como miembros de la familia) es un poco más complicado.

Fuentes:

Mounsey, AL, y SW Reed. Diagnosticar y tratar la pérdida de cabello. American Family Physician, 80.4 (2009), 356-362.

Sobera, Jenny y Boni Elewski. "Infecciones por hongos". Dermatología, 2da Ed. Eds. Jean Bolognia, y et. Alabama. Mosby, 2008. 1141-3.

Habif, Thomas. "Infecciones por hongos". Dermatología clínica, 4ª edición. Ed. Thomas Habif, MD. Nueva York: Mosby, 2004. 427-33.