El sistema inmune y su papel en la hepatitis

El sistema inmune es una colección de órganos, células y tejidos que trabajan juntos para proteger su cuerpo de enfermedades causadas principalmente por patógenos (bacterias, virus, parásitos y hongos ). Algunas partes del sistema inmune incluyen las amígdalas , los ganglios linfáticos , el apéndice, el bazo y el timo. Además, células especializadas, llamadas glóbulos blancos, patrullan todo el cuerpo en busca de patógenos .

El sistema inmune es un sistema de defensa muy complejo y juega un papel directo en la inmunización, enfermedades infecciosas, alergias y enfermedades autoinmunes. El sistema inmune está involucrado de una manera u otra en pacientes con todo tipo de hepatitis, ya sea como causa o tratamiento para la enfermedad.

Hepatitis autoinmune

Las enfermedades autoinmunes son el resultado de un proceso en el cual el sistema inmune confunde un órgano o sistema corporal con un invasor y lo ataca como tal. Esto produce inflamación y daño al órgano. La hepatitis describe una inflamación del hígado. Para las personas con hepatitis viral, un virus hace que el sistema inmunitario reaccione atacando el virus y causando daño al hígado en el proceso. Sin embargo, otra causa de hepatitis es un proceso autoinmune que daña el hígado.

La hepatitis autoinmune, cuando el sistema inmunológico del cuerpo confunde el tejido hepático normal con un invasor y ataca en consecuencia, es una enfermedad crónica que causa inflamación y daño hepático.

Si no se trata, la hepatitis autoinmune puede empeorar con el tiempo y provocar cirrosis e insuficiencia hepática. La enfermedad puede causar síntomas similares a los de virus u otros tipos de hepatitis, como:

Vacunas

Actualmente hay dos vacunas para prevenir contra dos tipos diferentes de hepatitis viral, hepatitis A y hepatitis B. Las vacunas, o inmunizaciones, usan un desencadenante (como material viral inactivado o debilitado) para crear una respuesta inmune contra el invasor. El sistema inmune tiene una respuesta desarrollada y efectiva cuando un verdadero patógeno se convierte en una amenaza.

Tratos

Para los pacientes con hepatitis viral crónica, el objetivo del tratamiento es prevenir el daño hepático que ocurre como resultado de la respuesta del sistema inmune al virus. Una de las formas en que la medicina moderna puede lograr este objetivo es mediante el uso de tratamientos, como el interferón alfa, que esencialmente estimulan al sistema inmunitario para que realice un trabajo más eficaz al atacar, y con suerte, eliminar el virus.