¿Cómo se puede saber si se trata de un topo o cáncer de piel?

Esta galería de fotografías alternará entre lunares normales y benignos y melanoma para que pueda aprender a reconocer cada una de ellas. Nota importante: separar los lunares y el melanoma no es fácil, incluso para los dermatólogos con años de entrenamiento, así que asegúrese de contactar a su médico si tiene alguna pregunta.

Mole normal (Nevus)

Alyssa B. Young / Getty Images

Un nevo es un tumor melanocítico benigno (no canceroso), más comúnmente llamado mole. Los nevos (el plural de nevo) generalmente no están presentes en el nacimiento, pero comienzan a aparecer en niños y adolescentes. La mayoría de los lunares nunca causarán ningún problema, pero una persona que tiene más de 50 lunares normales (o más de 5 lunares atípicos o "displásicos") tiene un mayor riesgo de desarrollar melanoma, la forma más agresiva de cáncer de piel .

Melanoma: irregularmente en forma

Imagen de melanoma cáncer de piel. Foto © Skin Cancer Foundation

Esta imagen de un tumor de cáncer de piel de melanoma muestra que a menudo tienen formas irregulares y multicolores.

Cuanto más temprano se detecta el melanoma, mejores son las posibilidades de un tratamiento exitoso. Los autoexámenes mensuales pueden ayudar a encontrarlo temprano. A menudo, el primer signo de melanoma es un cambio en el tamaño, forma o color de un lunar existente. También puede aparecer como una mole nueva o de aspecto anormal. La regla "ABCDE" se puede usar para ayudar a recordar qué observar.

Mole normal: Perfectamente redondo

Fotografía de un topo normal. Foto © Instituto Nacional del Cáncer

Este es un ejemplo de un topo normal; tenga en cuenta que es casi perfectamente redondo. Los tumores de melanoma difieren en que generalmente son asimétricos (asimétricos).

Aunque la mayoría de los lunares son benignos (no cancerosos), ciertos tipos conllevan un mayor riesgo de desarrollar melanoma. Alrededor del 2% al 8% de la población caucásica de EE. UU. Tiene lunares llamados nevos "displásicos" o "atípicos", que son más grandes que los lunares ordinarios (la mayoría mide 5 mm o más), tienen bordes irregulares y varios tonos o colores. Las personas que tienen nevos displásicos más antecedentes familiares de melanoma (un síndrome conocido como FAMM) tienen un riesgo incluso mayor de desarrollar melanoma a una edad temprana (menores de 40 años).

Melanoma: asimétrico con cambios

Imagen de melanoma cáncer de piel. Foto © Instituto Nacional del Cáncer

Un ejemplo de cómo los tumores de melanoma a menudo son asimétricos (desequilibrados), a diferencia de los lunares no cancerosos.

Si tiene 50 o más lunares normales (o 5 o más lunares "displásicos"), debe controlar su piel minuciosamente varias veces al año. (Incluso si no tiene lunares, debe hacerse un autoexamen de la piel una vez al año). Si observa alguno de los siguientes signos, comuníquese con su médico:

Mole normal: un color

Fotografía de un topo normal. Foto © Skin Cancer Foundation

Se muestra un lunar normal en esta imagen. Tenga en cuenta que el color es el mismo en todo el lunar: no hay múltiples tonos de marrón, negro o tostado, como suele verse en el melanoma.

Melanoma: Frontera Desigual

Imagen de melanoma cáncer de piel. Foto © Instituto Nacional del Cáncer

Este tumor de melanoma tiene un borde desigual, irregular o con muescas. Esta es otra forma de distinguir el melanoma de los lunares normales, que generalmente tienen bordes lisos.

Mole normal: variedad de tamaños y colores

Fotografías de lunares normales. Foto © Instituto Nacional del Cáncer

Los lunares normales vienen en una variedad de tamaños y colores: (a) una pequeña decoloración de la piel con forma de pecas (llamada "mácula"); (b) una mácula más grande; (c) un lunar que se eleva por encima del nivel de la piel; y (d) un lunar que ha perdido su color oscuro. Ninguno de estos ejemplos es melanoma.

Melanoma: regla ABCDE

Imagen de melanoma cáncer de piel. Foto © Instituto Nacional del Cáncer

Una lesión de melanoma que contiene diferentes tonos de marrón, negro y bronceado.

La regla "ABCDE" se puede usar para ayudarlo a recordar cómo se ve un tumor de melanoma:

Si observa que alguno de estos le sucede a uno de sus lunares, comuníquese con su médico de inmediato.

Mole normal: borde liso

Fotografía de un topo normal. Foto © Instituto Nacional del Cáncer

Más ejemplos de lunares ordinarios: (a) una decoloración de la piel uniformemente marrón o marrón, de 1 a 2 mm de diámetro, (b) una decoloración de la piel más grande, (c) un lunar ligeramente elevado sobre la superficie de la piel (d) ) un lunar que está más claramente levantado sobre la piel, y (e) un lunar rosa o de color carne.

Todos estos son normales, e incluso un solo topo puede pasar por estas etapas con el tiempo. Sin embargo, todos tienen un borde liso y están claramente separados de la piel circundante, en contraste con un tumor de melanoma.

Melanoma: cambios en el tamaño

Imagen de melanoma cáncer de piel. Foto © Skin Cancer Foundation

Nuestra fotografía final es un tumor de melanoma que es grande y ha crecido con el tiempo, una característica clave de un tumor de melanoma. Si ve alguna lesión cutánea sospechosa, especialmente una que sea nueva o cambie de tamaño, comuníquese con su médico.

Recuerde, el melanoma se puede curar si se detecta temprano, a diferencia de muchos cánceres. Por lo tanto, conocer sus factores de riesgo y comunicárselos a su médico puede ayudarlo a tomar decisiones más informadas sobre el estilo de vida y la atención médica. Si tiene lunares múltiples u otros factores de riesgo, es importante que realice autoexámenes regulares de su piel, consulte a un dermatólogo para exámenes regulares y protéjase del sol .