Enfermedades reumáticas asociadas con la hipertensión arterial pulmonar

La hipertensión arterial pulmonar es una enfermedad grave para la cual existen tratamientos pero no hay cura, según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre. La hipertensión arterial pulmonar secundaria puede ser causada por u ocurre a causa de otra afección secundaria.

Causas de la hipertensión pulmonar

La hipertensión arterial pulmonar (o presión arterial alta en los pulmones) es una condición médica poco común pero muy grave.

Este problema, no relacionado con el aumento de la presión arterial sistémica (hipertensión), es causado por la pérdida del volumen pulmonar y la pérdida de flexibilidad (elasticidad) de la arteria pulmonar, cuya función es devolver la sangre a los pulmones para la oxigenación.

Enfermedades reumáticas asociadas con la hipertensión pulmonar

La hipertensión pulmonar se asocia con una serie de condiciones. En pacientes con cicatrización extensa de los pulmones (fibrosis como se ve en la esclerodermia y, a veces, artritis reumatoide ), hay una capacidad pulmonar disminuida por lo que el corazón tiene que aumentar la presión necesaria para empujar la sangre a través de la arteria pulmonar hacia los pulmones. Otros pacientes desarrollan un aumento de la presión de la arteria pulmonar debido al estrechamiento de la arteria. Esto se puede observar en afecciones como la esclerodermia (a menudo en la forma limitada llamada CREST) ​​o menos comúnmente el lupus (lupus eritematoso sistémico). Recientemente, se descubrió que este tipo de hipertensión pulmonar está asociada con medicamentos para la dieta que ya no están en el mercado.

Síntomas

Los síntomas de esta condición incluyen dificultad para respirar y dolor en el pecho. El diagnóstico puede ser sugerido por una ecografía no invasiva del corazón (ecocardiograma). El cateterismo cardíaco (cateterismo cardíaco) que presenta algunos riesgos médicos a menudo se realiza para confirmar el diagnóstico.

Tratamiento

En el pasado, había poco tratamiento disponible para este problema que tenía un mal pronóstico.

Afortunadamente, hay terapias más nuevas disponibles para ayudar a los pacientes con su afección, que incluyen:

Las terapias adicionales incluyen oxígeno, anticoagulantes, diuréticos y rehabilitación cardiopulmonar. Si se le diagnostica este problema, lo mejor es ver a un médico de pulmón que tenga experiencia en este trastorno.

Respuesta proporcionada por Scott J. Zashin, MD, profesor asistente clínico en la Universidad de Texas Southwestern Medical School, División de Reumatología, en Dallas, Texas. El Dr. Zashin también es médico adjunto en Presbyterian Hospitals of Dallas y Plano. Es miembro del American College of Physicians y del American College of Rheumatology y miembro de la American Medical Association. El Dr. Zashin es autor de Arthritis Without Pain - El milagro de los bloqueadores anti-TNF y coautor del tratamiento natural de la artritis .