¿Qué son los quistes ováricos y cómo puedo tratarlos?

Los quistes ováricos son sacos llenos de líquido, similares a las ampollas, que son comunes en las mujeres durante sus años reproductivos. Se forman en los ovarios, los órganos del tamaño de una almendra en cada lado del útero. La mayoría de los tipos de quistes ováricos son inofensivos y desaparecen sin ningún tratamiento, pero hay algunos que pueden indicar otros problemas de salud o incluso provocar problemas de fertilidad.

Causas

La función normal de los ovarios es producir un huevo cada mes. Durante el proceso de ovulación, se forma una estructura parecida a un quiste llamada folículo dentro del ovario. El folículo maduro se rompe cuando se libera un óvulo durante la ovulación. Se forma un cuerpo lúteo a partir del folículo vacío y, si no ocurre el embarazo, el cuerpo lúteo se disuelve. A veces, sin embargo, este proceso no concluye de manera adecuada, causando el tipo más común de quistes ováricos: quistes ováricos funcionales.

Los quistes ováricos anormales, como la enfermedad del ovario poliquístico, pueden ocurrir como resultado de un desequilibrio de las hormonas femeninas (estrógeno y progesterona).

Tipos

Síntomas

Los quistes ováricos a menudo no causan síntomas; sin embargo, cuando hay síntomas, puede notar un dolor sordo o una sensación de plenitud o presión en el abdomen. El dolor durante el coito y en otros momentos también puede indicar la presencia de quistes ováricos.

El dolor o la presión pueden ser causados ​​por una serie de factores, como el tamaño, la hemorragia o el estallido de un quiste, que irrita los tejidos abdominales. El dolor también puede ser causado cuando se tuerce un quiste (llamado torsión), que puede bloquear el flujo de sangre al quiste.

Otros posibles síntomas de los quistes ováricos incluyen períodos retrasados, irregulares o inusualmente dolorosos. Si experimenta alguno de estos síntomas, notifique a su proveedor de atención médica lo antes posible.

Diagnóstico

A menos que haya síntomas, los quistes ováricos generalmente se diagnostican durante un examen pélvico anual. Se pueden realizar otras pruebas de diagnóstico, como un ultrasonido o una laparoscopía, si su médico detecta alguna anormalidad.

Tratamientos Comunes

El tratamiento de los quistes ováricos depende de varios factores, incluidos el tamaño y el tipo de quiste, la edad y la salud general de la mujer, sus futuros planes de embarazo y sus síntomas específicos.

Cuanto más temprano se encuentran los quistes ováricos, menos invasivo requiere el tratamiento.

A menudo, se aconseja a las mujeres jóvenes que no experimentan síntomas que esperen dos o tres meses para ver si los quistes se disuelven por sí mismos. En la mayoría de los casos, los quistes ováricos funcionales se disolverán sin intervención médica o tratamiento.

Ocasionalmente, se recetarán anticonceptivos orales o hormonas para reducir los quistes ováricos funcionales. Los anticonceptivos orales no son un tratamiento efectivo para otros tipos de quistes ováricos benignos, pero ofrecen cierta protección contra los quistes ováricos malignos.

La cirugía a veces es necesaria para tratar los quistes ováricos que no responden al tratamiento hormonal. Es posible que necesite cirugía si sus quistes no desaparecen después de unos pocos ciclos menstruales, o si son extremadamente grandes.

En mujeres posmenopáusicas

Las mujeres que desarrollan quistes ováricos después de la menopausia tienen más probabilidades de tener tumores malignos.

Para las mujeres posmenopáusicas que experimentan sangrado y dolor, es posible que sea necesaria una cirugía. Los procedimientos van desde simplemente extirpar el quiste hasta extirpar todo el ovario. En algunos casos graves, se recomienda una histerectomía (extirpación del útero).

El procedimiento quirúrgico específico requerido depende de una serie de factores, pero, por lo general, cuando se descubren los quistes ováricos anteriores, el procedimiento es menos extenso.

Aunque su médico discutirá el procedimiento planeado con usted, debe tener en cuenta que el alcance exacto de la cirugía puede ser desconocido hasta que la operación esté en progreso.

Tratamientos alternativos

Además de (o en lugar de) la cirugía y las píldoras anticonceptivas hormonales , algunas mujeres optan por remedios más naturales u homeopáticos para el tratamiento. Las terapias a base de plantas como el cohosh azul o la raíz de unicornio falso han aliviado a algunos pacientes, mientras que una dieta vegetariana con énfasis en remolachas, zanahorias, verduras de hoja verde oscura y limones ha demostrado ser exitosa para otros.

Otros tratamientos alternativos incluyen suplementos antioxidantes, remedios homeopáticos y paquetes de aceite de ricino para reducir la inflamación. La hidroterapia aplicada al abdomen puede ayudar a prevenir la ruptura de un quiste.

Lo que debe recordar acerca de los quistes ováricos

Debido a que los quistes ováricos a menudo no causan síntomas, es especialmente importante que las mujeres que han tenido quistes en el pasado se sometan periódicamente a exámenes pélvicos. Estas mujeres corren un mayor riesgo de desarrollar quistes adicionales.

Las mujeres que sufren de endometriosis pueden ver empeorados sus síntomas por la presencia de quistes ováricos, y hay una mayor probabilidad de que necesiten que se les extirpen los ovarios.

En el caso de los quistes ováricos malignos, que nuevamente son raros, el tratamiento precoz ofrece la mejor esperanza para la recuperación.

Fuentes:

> Women's Health.gov: Síntomas de los quistes ováricos (consultado en febrero de 2017).

> Institutos Nacionales de Salud: Descripción general de los quistes ováricos (consultado en febrero de 2017).