Muchas personas que se someten a radioterapia externa desarrollan problemas en la piel que pueden continuar mucho después de que el tratamiento haya terminado. La radioterapia externa , o radiación de haz externo, se realiza durante las visitas ambulatorias a un hospital o centro de tratamiento y utiliza una máquina que dirige los rayos de alta energía desde el exterior del cuerpo hacia el tumor.
¿Qué es radioterapia externa?
Para la mayoría de las personas, el período de tratamiento con radioterapia externa abarca muchas semanas.
La dosis de radiación y la cantidad de tratamientos se basan en algunos factores diferentes:
- El tipo de cáncer
- El tamaño del cáncer
- La ubicación del cáncer
- Tu salud general
- Cualquier otro tratamiento que pueda estar experimentando
Además de matar las células cancerosas, la radioterapia también puede dañar el tejido corporal sano en el área que se está tratando, por lo que deberá tener especial cuidado para protegerse de los posibles efectos secundarios. Antes del tratamiento, asegúrese de hablar con su equipo médico acerca de los efectos secundarios adicionales que pueda esperar y siga sus consejos para controlar esos efectos secundarios.
Los efectos secundarios comúnmente reportados de la radioterapia externa incluyen fatiga, pérdida de cabello en el área de tratamiento, bajo conteo sanguíneo, problemas de alimentación y problemas de la piel.
Los problemas de la piel son un efecto secundario común
Los problemas de la piel son un efecto secundario común de la radioterapia externa. Los tipos de problemas de la piel que ocurren como resultado de la radioterapia incluyen:
- Picazón
- Enrojecimiento o apariencia similar a una quemadura de sol
- Sequedad
- Irritación general
- La piel puede aparecer bronceada
Estos efectos secundarios ocurren en el área que está expuesta a la radiación. Las personas también pueden perder pelo en el área que se está tratando.
Consejos para controlar la irritación de la piel durante la radioterapia
El cuidado especial de la piel en el área de tratamiento específico es muy importante para controlar los problemas de la piel durante la radioterapia.
Puede encontrar los siguientes consejos útiles para reducir la irritación de la piel:
- No aplique ninguna crema dos horas antes o inmediatamente después de la terapia a menos que lo indique un médico, ya que algunos productos de crema para la piel pueden cambiar la dosis de radiación que ingresa al cuerpo.
- Use solo agua tibia para limpiar el área durante el baño. No coloque almohadillas térmicas, lámparas de calor o bolsas de hielo en el área de tratamiento ya que incluso el agua caliente puede dañar su piel.
- No use jabones perfumados, perfumes, lociones, desodorantes, cosméticos o cremas en el área tratada a menos que se lo indique su médico.
- No use ropa ajustada alrededor del área de tratamiento. Puede rozar contra el área causando irritación.
- Evite exponer el área tratada al sol o use salones de bronceado, incluso mucho después de que haya terminado la radioterapia.
- Evite rascarse la piel incluso si le pica.
- Informe cualquier problema de piel a su médico. Es posible que su médico le recete una pomada o crema para reducir la incomodidad.
Aunque la mayoría de las reacciones cutáneas desaparecen con el tiempo después de que finaliza el tratamiento con radiación, hay algunos casos en que la piel tratada permanecerá más oscura o será más sensible de lo que era antes del tratamiento. Pregúntele a su equipo médico si debe proteger su piel con bloqueador solar en cualquier punto y tenga especial cuidado de ser cuidadoso con su piel.
Fuentes:
Sociedad Americana del Cáncer. Radioterapia externa.
Sociedad Americana del Cáncer. Efectos secundarios comunes de la radioterapia.